MADRID DESPIDE A UNO DE LOS GRANDES DE LA MODA DEL SIGLO XX: YVES SAiINT LAURENT

"La moda es un cambio de actitud de las mujeres", Yves Saint Laurent

Retraro de YSL por el fotógrafo Jean Loup Sieff (uno de los más importantes en la historia de la fotografía)

 Madrid dice adiós a la exposición sobre Yves Saint Laurant que la Fundación Mapfre ha acogido desde que se abriese el pasado 6 de octubre. Esta muestra ha supuesto la primera retrospectiva realizada en España sobre este ilustre diseñador, y todo gracias a una de las personas que mejor le conoció, su compañero Pierre Bergé (cofundador de la casa de alta costura YSL)



15.000 prendas de alta costura entre 1962 y 2002. Todas sus obras conllevaban un proceso de creación que comenzaba en su pequeño Estudio 5 de la Avenida Marceau en París.

Estudio 5, Avenue Marceau, Paris, 16 (Estudio real del diseñador)

Yves fue todo un revolucionario, ya que se dirigió directamente a las mujeres, a quienes dotó de personalidad y de valor. Como dice Pierre: "cambió la vida de las mujeres, reforzó su poder, les dio confianza y las permitió aceptarse". 


Su primera colección, en 1962, fue la reafirmación de los cambios que se estaban produciendo en esta década en el género femenino. El trench coat, la chaqueta Bagán, las camisetas marineras, etc. YSL transporta el vestuario masculino a sus compañeras y propone una ropa innovadora para los armarios de las mujeres. 

Vestido corto de cóctel: pailletes tricolores  azul marino, blancas y rojas

Conjunto corto de día: gabardina de algodón beige y bermudas de gabardina de algodón negras

Para Saint Laurant no había una mujer, sino una polifacética visión de la feminidad.


La fama y el prestigio de Yves como diseñador traspasa fronteras y llega al cine. En la película Belle de Jour de Luis Buñuel (1967) protagonizada por su gran amiga, la actriz Catherine Deneuve, Saint Laurent fue el encargado de crear el vestuario que reflejase esa mezcla sutil entre sensualidad y clasicismo que encarnaba la actriz. 

Catherine Deneveu con un diseño de YSL exclusivo para la película

A pesar de su trepidante éxito, en 1971 fue el punto de mira de todas las críticas y polémicas de esta industria con el escándalo de la Colección 40. La colección Primavera/Verano del 7, reflejo de la ocupación alemana durante la II Guerra Mundial, rompía con la estructurada forma de la figura femenina. Con unos diseños que homenajeaban a las prostitutas parisinas de esta época, a las cuales se les rapaba la cabeza (de ahí los turbantes que llevaban las modelos de la pasarela), YSL reinventaba, una vez más, la moda, pero el ensañamiento de la crítica desprestigió la colección.

Colección 40, el escándalo de YSL

"La prenda más hermosa que puede vestir una mujer son los brazos del hombre a quien ama", YSL

La relación que el diseñador guardaba con el arte le llevó a hacer algunos de los diseños más originales, como los vestidos-escultura que subió a las pasarelas. La escultura de la artista francesa Claude Lalanne se incorporaba a los vestidos de inspiración árabe con los que Yves vistió a la modelo Veroushka. 

Inspirado en pintores, poetas y artistas, Saint Laurent vestía cuadros:
- Entre 1965 y 1969: el Pop Art y Andy Warhol inspiraron sus "cuadros geométricos"

- En 1969: vestidos-esculturas en colaboración con la artista francesa Claude Lannane.

- Entre 1979 y 1988: Yves evoca a poetas y pintores como Picasso, Matisse, Van Gogh, Braque o Léger. 

La imaginación del diseñador era increíble y supo muy bien trasladarla a su ámbito y creó la colección de Los Viajes imaginarios. India, Marruecos, Asia, África y España sirvieron de inspiración a unos vestidos con unos detalles y una estética que mezclaba originalidad y excentricidad con elegancia. 

El último baile reúne los trajes de noche y vestidos de ensueño que recuperan el lujo de siglos pasados y el elegante glamour de la edad de oro de Hollywood. 

El último baile

El 7 de enero de 2002 Yves anuncia su retirada y se sube a la pasarela su último desfile.

"Si Coco Chanel le dio a la mujer la libertad para vestirse como quisiera, Saint Laurent le dio el poder", Pierre Bergé.